Toscana, Introducción

Paisaje de la Toscana


La Toscana es una región situada al noroeste centro de Italia. Tiene una superficie de 22.994 kilómetros cuadrados y una población de 3.734.355 habitantes. La capital regional es Florencia. Limita al noroeste con Liguria, al norte con Emilia-Romaña, al este con las Marcas y la Umbría y al sur con el Lacio. Al oeste, sus 397 km de costas continentales están bañados por el mar de Liguria en el tramo centro septentrional entre Carrara y el golfo de Baratti, el mar Tirreno baña el tramo costero meridional entre el promotorio de Piombino y la desembocadura del Chiarone, que marca el límite con el Lacio. 

La región de Toscana es una de las mayores y más importantes regiones italianas por su patrimonio artístico, histórico, económico, cultural y geográfico. Está ubicada en la zona central de Italia. Es una de las metas turísticas más frecuentes en Italia. Su capital, ciudad más poblada y centro económico, administrativo y cultural es Florencia.

De forma más bien triangular y situada entre la parte septentrional del mar Tirreno y los Apeninos centrales, la Toscana tiene una superficie de aproximadamente de 22.993 kilómetros cuadrados. Aunque rodeada y cruzada por las principales cadenas montañosas dejando entre sí algunas escasas llanuras  caracterizadas por ser muy fértiles, en la región abunda un relieve dominado por el paisaje ondulante que conforman las colinas. 

El territorio toscano está poblado de colinas y montes. Las llanuras son escasas, costeras como la Versilia y la Maremma o aluviales como la llanura del Arno. En la costa se alternan largas playas y promotorios, las islas del archipiélago toscano pueden considerarse una prolongación de los relieves costeros. 

Las reservas naturales cubren casi un 10% del territorio toscano. En la región se encuentran tres parques nacionales italianos, uno de ellos es el Parque Nacional del Archipiélago Toscano (totalmente dentro del territorio toscano), mientras que el Parque Nacional della Foreste Casentinesi, Monte Falterona y Campigna y Parque Nacional de los Apeninos tosco-emiliano se encuentran ambos entre la Toscana y Elilia-Romaña

A continuación un video con las bellezas artísticas y arquitectónicas de la región....








La época anterior a los etruscos a finales de la Edad de Bronce y de Hierro son semejantes a los primeros griegos. El territorio toscano estuvo habitado por pueblos de la Cultura apenínica a finales del II Milenio antes de Cristo, quienes mantuvieron relaciones comerciales con los minoicos y los micénicos. Los etruscos crearon la primera gran civilización en la región, suficientemente grande para establecer una infraestructura de transporte para implementar la agricultura y la minería y producir un arte vibrante. En el siglo V antes de Cristo, derrotados por los griegos y cartagienese , se retiraron dentro de sus fronteras tradicionales y finalmente fueron vencidos y sometidos por Roma.

Más tarde los romanos dominaron la Etruria, anexionándosela en el 351 antes de Cristo, que pasó a ser una de las catorce regiones en que Augusto dividió Italia. Los romanos establecieron las ciudades de Lucca, Pisa, Siena y Florencia y dotaron a la zona de nuevas tecnologías y desarrollo, asegurando la paz. Entre sus logros se encuentran varias calzadas que transformaron el aspecto de Italia en general y de la Toscana en particular:


  • la Via Aurelia que recorría la costa hasta el puerto de Pisa y la base naval de Génova
  • la Vía Clodia que se detenía en Saturnia
  • la Via Cassia que unía Roma con Florencia
  • la Via Flaminia que unía Roma con la Umbria y el mar Adriático

En el siglo VI los longobardos llegaron a la región y eligieron a Lucca como capital de su Ducado de Tusca.

En Florencia, en 1434, la señoría de los Medici sucedió al gobierno democrático. Cosme I y Lorenzo el Magnífico convirtieron la ciudad cultural de Italia, estabilizaron la economía y con ello llegó a ser una potencia nacional. 

En el siglo XVI el papa Clemente VII y Carlos V nombraron a Alejandro de Medici como el primer gobernante formalmente hereditario. Siena no fue parte de la Toscana hasta 1555. 

Los sucesores de Cosme no estuvieron a la altura de sus predecesores, se empobreció la economía del Estado y el papel de Toscana en la política italiana.




Palazzo Chighi-Saracini (Siena, Toscana)


El toscano es el dialecto italiano que menos se ha distanciado del latín y ha evolucionado de forma lineal y homogénea. El toscano es la base de la lengua italiana, adoptado por ser el dialecto en que escribieron sus obras grandes autores italianos como Dante Alighieri, Francesco Petrarca, Giovanni Boccaccio o Nicolás Maquiavello, que le confirieron la autoridad de ser la lengua literaria de la península itálica. 

Toscana es conocida a nivel mundial por su gran riqueza de monumentos y obras de arte, así como por los conjuntos históricos de las ciudades de Florencia, Pisa, Siena y Lucca, mientras las ciudades de Arezzo, Grosseto, Pisoia y Prato son poco conocidas por el turista internacional,menos aun se conocen los monumentos de Livorno, Massa y Carrara.

Toscana ha sido a lo largo de la historia especialmente fecunda en el campo del arte. Civilizaciones como los etruscos y estilos artísticos como el Renacimiento tuvieron su origen en tierras toscanas. El actual territorio de la región cuenta con restos, yacimientos y testimonios de importancia de aquellas civilizaciones que la poblaron y de aquellos estilos artísticos que en ella se desarrollaron.

De la época etrusca destacan las necrópolis de Sovana, Vetrulonia y Populonia. Entre los restos romanos que perduran en Toscana se destaca la colonia de Cosa, una de las excavaciones mejor conservadas de los primeros años de la República Romana. De la Edad Media, y, sobre todo del Renacimiento proceden los restos más destacados de Toscana, declarados Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO





Salomón y la Reina de Saba (Puerta del Paraíso, Baptisterio de Florencia), realizado por Lorenzo Ghiberti


Los lugares toscanos inscritos como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco son las siguientes:




  • Centro histórico de Florencia (1982)
  • Piazza dei Miracoli, Pisa (1987)
  • Centro histórico de San Giminiano (1990)
  • Centro histórico de Siena (1995)
  • Centro histórico de la ciudad de Pienza (1996)
  • Valle del Orcia (2004)

Las villas de los Médici son unos complejos arquitectónicos rurales que formaron parte de las posesiones de la familia Médici entre los siglos XV y XVII que se encuentran en los alrededores de Florencia y en otros lugares de Toscana. Las villas eran palacios reales situados en la periferia de los terrenos administrados por los Médici, además de servir como centros de la actividad económica del área donde estaban situados.

La simplicidad es un elemento central de la cocina toscana. Se usan legumbres, pan, queso, hortalizas, champignones y fruta fresca. Se elabora aceite de oliva virgen extra con aceitunas de Moraiolo, Leccino y Frantoiano. La trufa blanca de San Miniato aparece en octubre y noviembre. 

Como entremés, son típicos los crostini di fegatini, una especie de tostadas de hígado. Platos de pasta típicos de Toscana son los paperdelle. Otros primeros platos son pappa al pomodoro, la ribollita y la minestra al cavolo negro




Piazza dei Cavalieri, Estatua de Cosimo I de Médici, frente a la Scuola Normale Superiore (Pisa)


Hay embutidos como la finocchiona, una especie de salchichón aromatizado con hinojo y también proschiutto toscano.

Carne de la mejor calidad procede del valle de Chiana, específicamente una ganadería conocida como Chiantina usada para el bistec a la florentina, carne magra con hueso. La carne a la parrilla procede de Valdarno y del Mugello. También se produce carne de cerdo. 

En cuanto a los postres son famosos los cantucci de Prato, bizcichos o galletas de almendras duros que se remojan en vino santo , o el castagnaccio, elaborado con harina de castaña y piñones. La schiacciata alla fiorentina es un postre de Carnaval.

En la tradición gastronómica toscana destacan sus vinos. El más famoso de todos es el Chianti, el mejor conocido internacionalmente. Mientras que las zonas de la Toscana central (ciudad metropolitana de Florencia y Provincia de Siena) son destacadas en todo el mundo desde hace décadas por la producción del Chianti Clásico y del Brunello di Montalcino y del Vino Nobile di Montepulciano, y los vinos producidos en las zonas costeras (provincia de Livorno y Grosetto), favorecidas por el clima más suave, seco y soledo, entre los cuales destacan la excelencia del Bolgheri Sassicaia, la estructura y el equilibrio de los vinos tintos de la Maremma y la armonía de los blancos (Ansoncia). Paralelamente al gran éxito de las producciones enológicas de las zonas costeras, deben señalarse también los siempre notables vinos tintos y blancos de la Provincia de Arezzo. Entre los demás vinos de la Toscana deben mencionarse el Carmignano, uno de los más antiguos de la región, producido en la comuna homónima, en la provincia de Prato, la célebre Vernaccia di San Gimignano, el Pitigliano, el Montescudaio y el Vin Santo



Baptisterio de Pisa








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